LOS CUATROS JINETES DEL APOCALIPSIS: UNA HISTORIOGRAFÍA EN EL AÑO DE LOS CUATRO EMPERADORES

  

COMENTARIO MONOGRÁFICO

 

   INTRODUCCIÓN

 

   La propuesta historiográfica.

   Desde que leo y estudio la Biblia hace ya 45 años de vida cristiana, me ha llamado la atención el Apocalipsis con mucho temor y temblor. Confieso que no ha sido nada fácil a lo largo de los años esclarecer su simbología y cuadratura. Leyendo y releyendo en este tiempo presente he tenido curiosidad sobre estos caballos y sus jinetes. Después de reflexionar me encuentro una posibilidad de “darles los nombres” a la luz de las pistas apocalípticas y a la luz de la historia. No pretendo nada de sensacionalismos solo presento lo siguiente para el estudio y el análisis. Veamos.

  

   LA INTENCIÓN

  

   Los cuatro caballos.

   Hemos comentado en una serie de artículos  en entregas anteriores –en el blog de Jairo Obregón: "La conquista: El mundo está en un gran sistema de crisis a la última frontera del jinete del caballo blanco apocalíptico", 29-12-2021; "El hambre: El mundo no ha dejado de ver al jinete y caballo negro de la hambruna sistémica y cíclica", 13-12-2021; "La pandemia: El mundo vio al jinete muerte del caballo peste, desde las variantes alfa hasta ómicron", 02-12-2021; "La tensa calma: El mundo en vilo ve cabalgar al jinete del caballo de la guerra", 17-11-2021 (http://obregonjairo212.blogspot.com)- lecturas de forma aleatorias y de manera simbólica, los cuatro jinetes y sus caballos y sus colores, concatenándolos con los acontecimientos en desarrollo de la actualidad contemporánea, evidenciándose, un paralelismo singular en la pluralidad de los hechos acaecidos con una retrospectiva y perspectiva que enriquece el lenguaje oculto ante los ciegos y sordos que no entendían la simbología como los pormenores contractuales; en este sentido: el primer caballo blanco es de la conquista; el segundo caballo bermejo es de la guerra; el tercer caballo negro es del hambre; el cuarto caballo bayo es de la peste; donde se ha sistematizado el lenguaje simbólico con la actualidad moderna. Siendo los signos que todavía sigue activa la inspiración del apocalipsis combativo ante las circunstancias que fueron adversas de los acontecimientos y de cómo a pesar de todos los apocalípticos fueron y siguen siendo un mensaje de esperanza que aguarda y no avergüenza. En detrimento de las actuales interpretaciones catastróficas al mejor estilo la pantalla grande y series de espanto sin el menor sentido práctico del entorno en que fue escrito lo revelado.

Significado: ¿Qué significado podría tener la palabra Apocalipsis? ¿Terror o esperanza? Para muchas personas suena a “terror”, “miedo” y “fatalidad” en la actualidad contemporánea, sin embargo, para los tiempos de donde fue escrito a finales del siglo I d.C., era un mensaje de esperanza contra esperanza para retomar la senda de vida.

´´ “El término griego apokalypsis está formado por la preposición apo, que indica procedencia, y el verbo kalypto, que significa “cubrir con un velo”. De manera que apokalypsis significa: “remover el velo”, “levantar el velo” y, por tanto, “des-velar”, “re-velar”. De aquí la traducción: “revelación”…O apocalipsis.

   San Pablo [por ejemplo], en la primera carta a los Corintios, les asegura que no carecen de ningún don, “mientras aguardáis la manifestación de nuestro Señor Jesucristo es el encuentro definitivo del creyente con el Señor Jesucristo” (1 Cor 1,7). El sustantivo que se traduce por “manifestación”, en griego es apoklypsis, es decir, revelación. La manifestación de nuestro Señor Jesucristo es el encuentro definitivo del creyente con el Señor, en el momento de la propia muerte y, de una manera definitiva, en el fin del mundo, en su venida gloriosa. Esta manifestación de Jesucristo la puede entrever aquel que escucha las palabras de este libro, mediante esta profecía, es decir, a través de este escrito inspirado que es el Apocalipsis”´´. 1.       

 

Palabras claves:

Simbología, esperanza, noticias, confrontar, conquistar, práctico, combativo, resistencia, apocalipsis, manifestación.

 

ÍNDICE TEMÁTICO:

Introducción

-La propuesta historiográfica

La intensión

-Los cuatro caballos

-Significado

Palabras claves

CAPÍTULO I

  1. Enigma de los caballos

1.1  Lo enigmático de los cuatro actores.

1.2  El caballo blanco.

1.3  El caballo bermejo.

1.4  El caballo negro.

1.5  El caballo bayo.

1.6  El Apocalipsis trae sorpresas.

1.7  Dificultad Interpretativa.

1.8  Lo enigmático interpretativo.

1.9  Los apocalípticos. 

 

CAPÍTULO II.

  1. Los cuatro seres vivientes.

2.1Interpretaciones por doquier

2.2 Los Cuatro son los Cuatro en sí.

2.3 Lo contrapuesto de los evangelios y los apocalípticos.

 

CAPÍTULO III.

  1. La simbología de los cuatro apocalípticos.

3.1  La numerología de los cuatros.

3.2  Los cuatro primeros sellos de los seis sellos.

 

CAPÍTULO IV.

  1. La propuesta de los posibles nombres de los generales o seres vivientes o jinetes en el marco del año 69.

4.1  Los cuatro jinetes del capítulo 6 y su contexto apocalípticos.

4.2  La muerte de Nerón.

4.3  Anarquía y persecuciones.

4.4  Galba, el Jinete de la conquista con su caballo blanco.

4.5  Otón, el Jinete de la guerra montado por el caballo rojo o bermejo.

4.6  Vitelio, el Jinete del hambre montando en el caballo negro.

4.7  Vespasiano, el Jinete de la peste montando el caballo bayo.

 

CONCLUSIONES.

APUNTES Y BIBLIOGRAFÍA.

ACERCA DEL AUTOR.

 

DESARROLLO TEMÁTICO.

 

   CAPÍTULO I.

 

1.    Enigma de los Caballos y sus colores blanco, rojo, negro y bayo.

 

 

1.1 Lo enigmático de los cuatro actores.

   La manifestación de los colores en cada caballo en particular tiene varias aristas o interpretaciones en la cuadratura de la tesitura que revelarían. Los caballos y sus colores tenían un lenguaje simbólico que presagian y avistan lo que venía en el orden de los acontecimientos. Cada color revelaba una situación que les tenía en perspectiva. A las que los entendidos interpretaban esas noticias o la historia de su época. Ellos no pensaron que estas revelaciones continuarían 21 siglos después. Los creyentes esperaban esa manifestación o un apocalipsis para su tiempo y estaban apercibidos de esto.

 

   1.2 El Caballo Blanco.    

   En el orden apocalíptico es el primer caballo blanco que sale para vencer. En la simbología alegórica del apocalipsis no es nada fácil determinar quién en realidad fue este jinete y su caballo blanco de la conquista. Esto es un enigma que trataremos de darle un sentido en conjunción hasta donde podamos, pues no pretendo tener el monopolio de la verdad en un tema controversial. Muchos tienen la idea de que es Jesús el Cristo este jinete del capítulo 6 confundiéndose con el jinete del caballo blanco del capítulo 19, una interpretación de los antiguos. 

   ´´ “Cabalgado por el jinete de la conquista. “Cuando abrió el primer sello, oí al primer ser viviente, que decía: Ven. Mire, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer” (6,2).

   San Ireneo y San Crisóstomo sostienen que el arquero montado sobre el caballo blanco es la triunfante propagación del Evangelio; una expansión que triunfa gracias al apoyo político. El padre Castellani lo deja claro que es la Monarquía Cristiana, la Christianitas, es el orden romano convertido a la ortodoxia cristiana [que todavía está vigente en la actualidad].

   Algunos autores, como William Hendriksen, afirman que el jinete del caballo blanco es Jesús de Nazaret [Hendriksen, William, (1967)].

   Portar un arco, un arma para alcanzar grandes distancias, es representación de lo que hicieron los reinos cristianos, apoyando la evangelización a pueblos lejanos. Como ejemplo de lo predicho aconteció el bautismo de los pueblos germanos y eslavos o la evangelización de América [con la espada y la cruz].

   Salió ‘a vencer’, esas victorias, son las victorias de Constantino [de Constantinopla de que “con esta Cruz vencerás”], de Teodosio, de Carlos Martel. Aquellos que afianzaron y construyeron sobre el antiguo orden romano, la Romanitas, el orden cristiano que perduró desde Constantino hasta el emperador Carlos V [Castellani, 2005, pág. 105]. El milenio que después es narrado en la parte final del Apocalipsis [Defiende esta idea José Antonio Fortea en su libro Daemoniacum o el padre Emanuel André en el drama del fin de los tiempos].

   Los detalles mencionados acerca del color del caballo y el tipo de arma que el jinete porta, revela el testimonio de la Iglesia en el primer periodo del cristianismo (del año 31 – 100 d.C., específicamente) lo cual se caracterizó por su pureza de doctrina y el poder ofensivo del evangelio”.     

   1.3 El Caballo bermejo.

   En el orden apocalíptico es el segundo caballo que sale la intención de la confrontación de la guerra entre todos, como si se tratase de una guerra civil o algo parecido de una serie de revueltas que traería sangre por todos los lados, que de manera casi continua siguió en el panorama de la época.

   “El corcel rojo [Tomo IV del Nuevo Testamento. La Biblia Vulgata latina, tr. Anotada por P. Scio de San Miguel (2° Edición). Madrid: Imprenta de don Benito Cano 1797. p. 132] o alazán es montado por el jinete de la guerra”.

   “Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente que decía: Ven. Entonces salió otro caballo, rojo; al que lo montaba se le concedió quitar de la tierra la paz para que se degollaran unos a otros; se le dio una gran espada grande. Ap. 6,3-4. El padre Castellani consigna que desposeída la monarquía de su existencia [Castellani, 2005, pp.105] ‘vendrá guerra o rumores de guerra [Mt. 26,6] como dice Jesucristo. Y añade diciendo que esto ‘es comienzo de los dolores’ [Mt. 24.8] pero ‘aún no es el fin’ [Mt.24, 6].

   Benedicto XV en 1917 declaró: “Jamás hasta ahora se había visto en el mundo la guerra como institución permanente de toda la humanidad”. Y ya Castellani advierte que viendo dos guerras mundiales parece como si el mundo se prepara para una tercera. [Estamos ante una gran conflagración mundial con fuerza nuclear que jamás se había visto en la historia de la humanidad capaz de que desaparecer de la faz de la tierra. De esto hablo en mi blog donde escribo del caballo bermejo. Ver blogs obregonjairo212.blogspot.com].


   1.4 El Caballo negro.

   En el orden apocalíptico es el tercer caballo que sale para hambrear a propósito subiendo los precios de costos a los alimentos que se consumían regularmente, por la arrogancia desmedida y la particular saña de ver sufrir a los más desposeídos como los pobres. Esta práctica mal sana perdura en las clases altas y sobre todo de los  “multibillonarios” o de las grandes “elites”  para que los demás como la clase media y los pobres cumplan con sus imposiciones. Torcer la voluntad por hambre. Vieja y moderna práctica.  

   “Cabalgado por jinete del hambre. ‘Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente, que decía: Ven. Miré, y vi un caballo negro. El que lo montaba tenía una balanza en la mano. Ap. 6,5. Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: ‘Dos libras de trigo por un denario y seis libras de cebada por un denario, pero no dañes el aceite ni el vino. Ap.6, 6. [Traducción de Nácar-Colunga].

   El tercer jinete monta un caballo negro y se entiende generalmente como la hambruna. El jinete lleva un par de balanzas o basculas de pesaje, lo que indica la forma en que el pan se pesa durante una hambruna. De los cuatro caballos, el caballo negro y su jinete son los únicos cuya aparición se acompaña de una pronunciación vocal. Juan oye una voz, no identificada, pero procedente de los cuatro seres vivientes, que habla de los precios del trigo y la cebada, también se dice ‘pero no dañes el aceite ni el vino’. Esto sugiere que el hambre del caballo negro es el aumentar el precio del grano, pero sin afectar los suministros de aceite y vino. Una explicación de esto es que los cultivos de cereales hubieran sido más susceptibles en años de hambruna que los cultivos de olivo y viñedo; la declaración también podría sugerir una continua abundancia de lujos para los ricos, mientras que alimentos básicos como el pan son escasos, aunque no totalmente agotados.

   Por otra parte, la preservación del aceite y el vino podría simbolizar la preservación de los fieles cristianos, que utilizan aceite y vino en sus sacramentos [o cualquier acto religioso].

   

   1.5 El Caballo bayo.

   En el orden apocalíptico es el cuarto caballo. Lo grave que se presagia es la enfermedad o la peste como se le conocía anteriormente. Era la consecuencia de los otros tres caballos que solo traían acontecimientos inesperados.

   “San Jerónimo en la Vulgata [Latina] traduce como pallidus pálido, como traducen Petisco – Torres Amat añadiendo estos el epíteto de macilento [Tomo V: el Nuevo Testamento. La sagrada Biblia nuevamente, traducida de la Vulgata Latina al español: (José Miguel Petisco y Félix Torres Amat, trad.) Madrid: Imprenta de D. Miguel de Burgos. 1832. p. 692] montado por el jinete de la muerte.

   ‘Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente que decía: Ven. Miré, y vi un caballo bayo. El que lo montaba tenía por nombre Muerte, y el Hades lo seguía: y les fue dada potestad sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad y con las fieras de la tierra’. Ap. 6,7-8.

   El cuarto y último jinete se llama muerte. De todos los jinetes, es el único a quien el propio texto explícitamente da un nombre. Todavía, se aplican los nombres de “pestilencia” o “peste” a este caballero, sobre la base de traducciones alternativas de la Biblia (como la de Jerusalén). A diferencia de los otros tres, no se describe un arma u objeto, en lugar de eso se [le] sigue el Hades. Sin embargo, las ilustraciones de este muestran principalmente que lleva una guadaña.

   El color del caballo de la Muerte se describe como khlomos en la koiné original griego, que a menudo se traduce cómo ‘pálido’, aunque ceniciento, verde claro, y verde amarillento son otras posibles interpretaciones; en la que el color puede ser gris, verde, amarillo, pero siempre un color indicando la palidez enfermiza de un cadáver.

   El comienzo del verso [versículo] ‘se le dio poder sobre la cuarta parte de la tierra’ puede referirse únicamente a la Muerte y el Hades, o puede resumir el papel de los cuatro jinetes. Los estudiosos no están de acuerdo en este punto”´´. 2.

              

    1.6 Apocalipsis trae sorpresas.

   Tengo que hacer justicia al reconocer al escritor apocalíptico el estadounidense Juan Stam de nuestros tiempos que está en la presencia del Señor. ´´ “¡Quien entra en el mundo de apocalipsis tiene que estar preparado para muchas sorpresas!” declaró Stam en el 2008. “El apocalipsis es un libro realmente único dentro del canon bíblico y aun en la literatura universal. En primer lugar, los lectores modernos de Apocalipsis deben tratar de comprender el mensaje que el libro tenía para los creyentes del Asia Menor, en los tiempos de Juan. Estudiar el trasfondo histórico, las claves hermenéuticas y el mensaje del Apocalipsis es un trabajo de toda una vida [como la de este maestro como muy pocos].

 

1.7  Dificultad interpretativa.

   A pesar de la dificultad del paso de casi dos milenios desde que el libro salió a la luz, abundan los datos que ayudan a entender el mensaje central [que fue de esperanza en su época y que ahora es de desesperanza para muchos de nuestra época por las diversas interpretaciones a saber, parafraseando a Stam] de todos los pasajes e incluso la inmensa mayoría de los detalles. A veces, sin embargo, es necesario simplemente confesar nuestra actual ignorancia ante ciertas frases del texto. Para otros detalles hay una o más interpretaciones posibles pero ninguna segura”´´. 3.

 

   1.8 Lo enigmático interpretativo.

   Es enigmático saber a ciencia cierta la deferencia de la diferencia que se interpreta sobre este presupuesto. No sabemos la identificación de los personajes y sus representaciones a ciencia cierta. Por lo menos hay una docena de interpretaciones que van desde los tiempos de Domiciano hasta la evangelización y venida de Cristo. Algunos lo identifican con el anticristo o un falso profeta o mesías que se autoproclame. Hay para todos los estilos. Muchos entrelazan al jinete del capítulo 6 con el jinete del capítulo 19 de revelaciones lo cual no tiene mucho asidero real en lo particular. Lo extraño es que este jinete obedece “a los cuatro seres vivientes”, se le da un arco y una corona, y sale bajo una orden para “vencer” siendo el primer caballo que salta a la palestra y le siguen tres caballos más para completar un cuadro particular de una significación que le daremos nuestra humilde interpretación en el concierto de interpretaciones previstas.

 

   1.9 Los apocalípticos.

   En los lenguajes apocalípticos –siendo que existen centenares apocalípticos como el libro de Daniel y hasta el de Juan- es de aclarar que fueron escritos de manera simbólica o alegórica los acontecimientos de una situación dada o vivida que al leerlos daban luces de esperanzas a quienes sabían su lenguaje oculto, que era la mayoría de las personas que pertenecía a la tradición judeo-cristiana en este caso. Al trastocarse con otras civilizaciones o culturas (o potentados) aledañas no podían entender su significado a todas luces. De eso se trataba ocultar algo con imágenes que no se diera a conocer a sus enemigos que estaban al asecho de los profetas y posteriormente de los apóstoles y del pueblo humilde que tenía una fe viva a pesar de las circunstancias que les tocó vivir o sobrevivir muchas veces.

 

CAPITULO II.

 

   2. Los Cuatro Seres Vivientes.

   Lo sorprendente de la narrativa simbólica de los cuatro seres vivientes es que anteceden de los cuatro caballos que salen en casi en un mismo tiempo con características particulares según los acontecimientos. El misterio consiste no solo lo misterioso de los caballos, sino que obedecen órdenes y sentencias de estos seres casi ocultos con una connotación aterradora. Por eso es que se oía una voz que salía e insistía que mirara Juan de Patmos (a quien está en discusión si fue o no el apóstol de Jesús).

 

   2.1 Interpretaciones por doquier.

  Al igual que los caballos los cuatro seres vivientes han tenido una avalancha de interpretaciones de todo tipo hasta rallar en la esquizofrenia espeluznante. Desde luego, no sabemos cómo tal quienes eran en el escenario descrito por las implicaciones a lo que llevan las interpretaciones.

 

   2.2 Los Cuatro son los Cuatro en sí.

    En una sistematización de los acontecimientos acaecidos en el año 69 de la Era Cristiana, sucedió en tiempos posterior a Domiciano que el Imperio Romano estaba en una revuelta de poderes encontrados por las apetencias y tenencias de poder que los llevó a coronar cuatro generales en un mismo año uno seguido del otro. Es por ello que inferimos –con modestia- que en la simbología los cuatro seres son esos personajes que en la apocalíptica tenía una significación quizás para advertir que el Imperio se estaba dividiendo y cayéndose en su estructura medular, lo que “era una buena noticia” a los que eran perseguidos como los cristianos convertidos del judaísmo en ese periodo en consecución.

 

   2.3 Lo contrapuesto de los evangelios y los apocalípticos.

   En este acento, el mensaje de amor al prójimo de los evangelios del reino de Dios dado a los judíos de galilea de los gentiles que era de humildad frente a los males e imposiciones, a los apocalípticos de hacer resistencia posesionándose en frente de combate, donde la caída del imperio era de esperanza de lucha de los cristianos o mesiánicos del Asia Menor en cruda persecución –el libro de Hebreos y el Apocalipsis son vividos en esta zona en particular-. Son dos momentos neo testamentarios que se debe tener cuidado al tenor. Desde luego, no están en desacuerdo sino, que las fórmulas fueron cambiando de acuerdo a las circunstancias vividas. Acotamos.

  

   CAPÍTULO III.

 

3. La simbología de los cuatro apocalípticos.

 

3.1 La numerología de los cuatro.

    El significado de los números en la Biblia tiene varias simbologías que es todo un estudio aparte. En lo que concierne al número cuatro (4) es de análisis y comprensión según el texto bíblico. Por lo general, significa “una plenitud” o lo “relacionado con algo de exactitud” en particular o relacional interpretativa.

   Según la narrativa bíblica para su época antigua de los números en cuanto al número “Cuatro” (4): En el Cuarto Día, “Dios creo el Sol, así como la Luna y las Estrellas. Los elementos son Cuatro, “la Tierra, el Aire, el Fuego y el Agua”. De la misma manera, son Cuatro Estaciones durante todo el año: primavera, verano, otoño e invierno. A Eva, mujer de Adán se le menciona solo cuatro veces.

   Siguiendo con la numerología del número Cuatro, encontramos que se mencionan Cuatro Reyes Persas (aunque son mucho más). Se mencionan cuatro bestias apocalípticas: el oso, leopardo y el león, dado que la cuarta bestia era desconocida.

   En Zacarías 6 se habla de 4 carruajes con unos cuatro caballos al estilo de Apocalipsis, que mencionaremos en este comentario.

   No obstante, todos sabemos de los cuatro evangelios (los tres primeros sinópticos y el cuarto es teológico). Y en cuanto a la vida del apóstol Pablo se menciona que se relacionaba en cuatro culturas.

   Los cuatro ángeles que están parados en los cuatro rincones de la tierra (porque se creía cuadrada) que se menciona en Apocalipsis 7,1; y continuando con el libro de Revelaciones se menciona que había cuatro criaturas en el trono, siendo el primero un león, el segundo parecido a un águila, el tercero era un hombre y la cuarta criatura era como un águila que volaba. Y los cuatro jinetes montando cuatro caballos de cuatro colores como el blanco, rojo, negro y bayo respectivamente que es el tema en consideración.

  

   3.2 Los cuatro primeros sellos de los seis sellos.

   Empecemos, de alguna manera encuadrar los acontecimientos que nos muestran los detalles que tienen un impacto histórico o una pista a considerar.

   ´´ “El Circo Massimo, en Roma, que actualmente es simplemente un espacio vacío, lleno de yerbas, en tiempos del imperio romano fue unos de los estadios más impresionantes, donde se realizaban los juegos y las competiciones que llenaban de fervor sus gradas.

   Se trataba de una carrera de cuadrigas, lo que suponía cuatro caballos. Este pasaje de Apocalipsis utiliza la cuadriga para hablar del fruto de los cuatro primeros sellos, que el misterio de Cristo abre y, con los cuales, se empieza a iluminar la historia [sobre todo en los tiempos de finales del siglo I de la Era Cristiana].

   El primer sello muestra un caballo blanco, signo de la victoria. Pero, ¿de qué victoria? ¿Se trataba de un símbolo positivo o negativo? Algunos han visto aquí, en el caballo blanco, un símbolo de Cristo o de anuncio del evangelio [como hemos comentado anteriormente] (así san Ireneo, san Crisóstomo, A. Feuillet, P. Prigent). Pero, si los otros tres caballos que vienen a continuación son negativos, parece más lógico que el primero también lo sea.

   Es lo mismo que se encuentra en la visión del profeta Zacarías [un profeta apocalíptico] cuando contempla cuatro carros de guerra, símbolo de cuatro dominaciones violentas, con cuatro caballos cada uno: rojos, negros, blancos y pardos (Zac. 6,1-3). No toda victoria es auténtica, también hay aparentes [o señuelos]. La principal victoria falsa es la de aquel que aparenta ser el primero, el príncipe que domina al pueblo. “¿Hay algo más hermoso que un caballo blanco, con jinete de victoria? Todo el mundo le aclama. Pero pronto descubrimos su verdad (=mentira), hecha de guerra, hambre y muerte” (X. Pikaza, Apocalipsis, 93-94). [No obstante, en la narración de la entrada triunfal a Jerusalén por parte de Jesús de Nazaret fue un pollino montado y no en un caballo blanco].

   La figura del emperador romano aparece aquí como símbolo de esta falta victoria. El historiador Suetonio explica que “el día que se celebró el triunfo de Tito sobre Judea (en el año 70) [en la caída de Jerusalén de este año singular setenta], Domiciano (que entonces era solamente un joven pretencioso) los acompañó (a Tito y a su padre, el emperador Vespasiano) montado en un caballo blanco” (Suetonio, Vita Domitiani, 2). El texto evoca aquí la figura del ganador, aquel que se considera el ganador, el más grande, el vencedor, el que está por encima de los demás. “Tenía un arco”: continúa la evocación de la figura de Domiciano que, según el testimonio del mismo historiador, tenía una afición “muy grande al ejercicio del arco” (Vita Domitiani, 19).

   El jinete con el caballo blanco es, pues, aquí figura del dominio sobre los demás, aquel que señorea sobre ellos, pero esto es simple apariencia.

   Hay también otras victorias aparentes en la historia y en nuestro mundo: el caballo rojo [bermejo] de la sangre, la guerra, la violencia; el caballo negro, de hambre, la injusticia, la desigualdad, el abuso, la corrupción; y, finalmente, el caballo amarillento [bayo], el caballo de la muerte [en otras interpretaciones más consensuadas se habla de la peste o enfermedad]. Aquel que tiene el color de la hierba pasada, la hierba que hoy es y “a la tarde se marchita y se seca” (Sal 90[89], 6) [En este sentido, con la misma comparación que hace el apóstol Santiago con los ricos que se “marchitan sus empresas” (1,11)]. El color amarillento –algunos lo traducen por “pálido”, “bayo”, “macilento”- indica aquí la corrupción, aquello que está seco, aquello podrido o corrompido. Todas ellas son victorias aparentes. Parece que salgan vencedores, pero su victoria es solamente temporal. Ellos no dan el sentido definitivo [o definitorio]”´´. 4.

           

    CAPÍTULO IV.

 

    4. La propuesta de los posibles nombres de los generales o seres vivientes o jinetes en el marco del año 69.

 

    4.1 Los Cuatro jinetes del capítulo 6 y su contexto apocalíptico e histórico cultural.

   Seguimos insistiendo que solo inferimos, puesto que no contamos ni con los documentos ni con nada que apoyar esta interpretación de manera académica solo es un punto de vista o perspicacia a manera de propuesta o supuesto. El año 69 es muy crucial, puesto que, en ese año se coronaron cuatro generales algo poco visto en la historia, por ello es conocido como el año (69) como el año de los cuatro emperadores. De aquí, sobresalen varias aristas para reinterpretar ese episodio que tenía que ser entendido. Muchos tienen sus propias conclusiones a saber cómo la hemos sistematizado en este comentario. Pienso que en los procesos apocalípticos es muy difícil determinar las actuaciones a la luz de un apocalíptico destinado a revelar un hecho preciso en tal sentido. Nadie puede a raja tabla determinar tal o cual cosa en su contexto muy turbulento de persecuciones para los cristianos del Asia Menor.

   Habrá que hacer justicia que los cristianos de los evangelios de dar la “otra mejilla” que era “una ley romana”, no son los mismos cristianos que “luchaban” por la caída del imperio romano, son dos fuentes que fueron cambiando consuetudinariamente por la distancia cultural de los que vivían en Judea antes del año 33 a los que vivían varios años después en las localidades de lo hoy en día es Turquía en los años 90. Los primeros cristianos fueron más cándidos pero los cristianos del final de siglo fueron combativos. Pero, ambos grupos sentían que su fe, esperanza y amor era los que los guiaba y daba fuerzas de las flaquezas de todo ese proceso de crecimiento personal, colectivo en esa espiritualidad liberadora lo que con el tiempo se denominó acto salvífico o salvación, pero, no como la conocemos actualmente de un acto futurístico. No era ese su sentido ontológico.

   Lo que tenemos son inferencias por lo difícil que ha sido dos mil años de brecha histórica que en nuestra era moderna tenemos poca luz frente a tales desafíos encontrados.

   Ese año 69 se dieron estos acontecimientos que paralizaron el imperio y el año siguiente fue la caída de Jerusalén en el año 70 del primer siglo y se hizo mención a manera de comprender su proceso histórico puesto estos hechos era conocido, pero no en su exactitud por las comunidades cristianas y necesitaban reorganizar sus fórmulas de seguimiento en la senda que tenían por delante. Estos actos y sus consecuencias es lo que nos dan luces para replantear una propuesta historiográfica con lo poco que tenemos de la data de información. Por lo cual, y en este tenor nos proponemos con toda modestia y moderación respetando a los historiadores y sus academias de investigadores.

  En tal sentido, los nombres son en perspectiva y perspicacia serían los siguientes: Galba, Otón, Vitelio y Vespasiano. En ese orden consecutivo.

 

    4.2 La muerte de nerón.

   ´´“Tras el suicidio forzado de Nerón el 9 de junio del 68 [d.C.] hubo un periodo de guerra civil, la primera en Roma desde la muerte de Marco Antonio en el 31 a.C. El conflicto duró poco más de un año, conociéndose el “año de los cuatro emperadores”, ya que en aquellos agitados meses Roma vería vestir la púrpura a cuatro hombres distintos. Entre junio del año 68 y diciembre del año 69, Roma sería testigo del nombramiento de y caída de Galba, Otón y Vitelio, hasta la definitiva ascensión al poder de Vespasiano que lograría por fin estabilizar el Imperio [romano] e instalar una nueva línea hereditaria, la dinastía Flavia.

 

   4.3 Anarquía y persecuciones.

   La anarquía política y militar creada por esta guerra civil tuvo serias repercusiones, originando, entre otros problemas, la sublevación de Batavia”´´. 5.

 

   4.4 “Galba, el jinete de la conquista con su caballo blanco”

    Encontramos que, “Cuando abrió el primer sello, oí al primer ser viviente, que decía: Ven. Miré y vi un caballo blanco, y el que lo montaba sobre él tenía un arco, y le fue dada una corona, salió vencedor, y para vencer”. Ap. 6, 2. En tal sentido, como hemos dicho anteriormente, no tiene mucha relevancia historiográfica el que este personaje sea el Mesías y la proclamación del evangelio, puesto que, era una simbología –que deducimos- para describir a Servio Sulpicio Galba, ´´“más conocido por la historiografía romana como Galba, fue un emperador romano que gobernó desde el 8 de junio de 68 hasta el 15 de enero 69 [d.C.]…procedía de una familia patricia noble y rica. Fue el último emperador romano a la antigua aristocracia republicana…hizo carrera militar y político. Bajo Tiberio fue legado de Aquitania desde el 31 [d.C.] hasta el 32 [d.C.] y cónsul en el 33 [d.C.], bajo Calígula fue legado de Germania Superior desde el 39 [d.C.] hasta el 41 [d.C], y bajo Claudio participó en la conquista de Britania en el 43 [d.C.] y gobernó la provincia de África con el rango de procónsul desde el 45 [d.C.] hasta el 47 [d.C.]…hasta que en el año 60 o 61 [d.C.] Nerón le nombró gobernador de Hispania Tarraconense… Finalmente, el senado reconoció oficialmente a Galba como emperador y Nerón tuvo que suicidarse. Unos meses más tarde entró en Roma, pero para entonces ya había empezado a ser impopular a los ojos de la población de la capital, de la Guardia Pretoriana y de los soldados de los ejércitos provinciales. Esto fue acusado por las represalias contra algunos dignatarios y comandantes militares prominentes, el descontento de los soldados contra la avaricia del emperador y el debilitamiento general del gobierno central. En la Germania Inferior, el gobernador Aulo Vitelio se reveló, apoyado por varias provincias occidentales…Uno de sus compinches, Marco Salvio Otón, organizó un motín junto a la Guardia Pretoriana se hizo con el poder. Servio Sulpicio [Galba] fue asesinado en el Foro Romano tras solo siete meses en el poder”´´. 6.

   Es por lo comentado que después de la muerte de Nerón, Galba vino para vencer siendo un vencedor que era lo que se esperaba en su coronación, y de hecho, llevaba una “corona” y un arma que era un “arco” que podía a distancia eliminar a sus enemigos porque era un vencedor. Al no poder cumplir con los anhelos de su victoria por una guerra civil encarnizada como medida lineal “sanciona” (desde entonces se practicaba las sanciones para castigar a otros) a todos los que no reconocen su corona o poder y manda a matar a senadores por miedo a las conspiraciones sin pruebas al parecer; es por ello, que salen los otros caballos en representación de los cuatro seres vivientes, que son los jinetes de cuatro caballos con cuatro colores; que galopan con una determina imposición, que seguiremos describiendo a continuación.

 

   4.5 Otón, “el Jinete de la Guerra montado por el Caballo Rojo o Bermejo”.

   “Cuando abrió el segundo sello, oí al segundo ser viviente que decía: Ven. Entonces salió otro caballo, rojo; al que lo montaba se le concedió quitar de la tierra la paz para que se degollaran unos a otros; se le dio una espada grande”. Ap. 6,3-4. [Otón, fue un personaje influyente amigo de Nerón en vida que se ofende de las actuaciones que derivaron los hechos congruentes y por su ambición desmedida que deseaba los honores hacia él. En componenda, soborna la Guardia Pretoriana y es la causa de la muerte de Galba].

  ´´ “Otón fue reconocido como emperador por el Senado el mismo día. El nuevo emperador fue recibido con alivio. A pesar de su ambición y codicia, a Otón no se le conocía que fuera tiránico ni cruel, por lo que esperaba que fuese un emperador justo. Pero estaba el problema con Vitelio, quien llevaba días marchando sobre Italia desde Germania [hoy Alemania]. Vitelio poseía el mando de las legiones de élite del imperio, compuestas por veteranos de las guerras germánicas, como la I Germanica y la XXI Rapax. Estos eran sus mejores argumentos para conseguir el poder, Otón no tenía intenciones de iniciar otra guerra civil y envió mensajeros para proponer una paz e invitar a Vitelio a ser su hijo adoptivo. Sin embargo, era ya demasiado tarde, y el ejército de Vitelio golpeó Italia con una serie de victorias menores. Otón fue finalmente derrocado en la primera batalla de Bedriacum. En vez de huir e intentar un contraataque, Otón decidió poner fin a la anarquía suicidándose. Había sido emperador poco más de tres meses”´´.

 

    4.6 Vitelio, “el Jinete del hambre montando el Caballo Negro”.

   “Cuando abrió el tercer sello, oí al tercer ser viviente, que decía: Ven. Miré, y vi un caballo negro. El que lo montaba tenía una balanza [peso] en la mano”. Ap.6, 5. Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: Dos libras de trigo por un denario y seis libras de cebada por un denario, pero no dañes el aceite ni el vino”. Ap. 6.6. [En consecución de los acontecimientos de los emperadores muertos Galba y Otón en pocos meses de revueltas, conspiraciones y traiciones constantes que sacudieron el Imperio romano de ese año en particular el 68 y 69 d.C., vemos los elementos de las características de los caballos y lo que presagian: la del “vencedor” que no venció, con Galba; la de la guerra que se degollaran que en sí sucedió, con Otón; ahora seguimos con el hambre con una balanza en la mano, con Vitelio].

   ´´“Tras la noticia del suicidio de Otón, Vitelio fue reconocido como emperador por el Senado. Con la aceptación garantizada, Vitelio salió de Roma. A pesar de todo el comienzo de su reinado no fue favorable. La ciudad acogió con inquietud el acceso al cargo como Pontifex Maximus de Vitelio en la misma fecha del aniversario de la batalla de Alia de 394 a.C., un día de malos auspicios para la supersticiosa sociedad romana. Los acontecimientos que seguirían demostrarían la certeza de tales temores. Con el trono fuertemente asegurado, Vitelio inició una serie de fiestas, banquetes, de los que Suetonio cita tres en un mismo día: mañana, mediodía y noche [de fiestas o parrandas que causaron males económicos], y desfiles que llevaron a la tesorería imperial a la bancarrota [de ahí la moraleja del hambre]. Pronto se acumularon las deudas y los prestamistas empezaron a solicitar los pagos [con sus intereses]. Vitelio mostró su naturaleza violenta al reprimir con crueldad el atrevimiento de los demandantes mediante torturas y ejecuciones [para no pagar las deudas contraídas de los festines a diario]. Con las finanzas imperiales en un estado pésimo, Vitelio hizo asesinar a todos los ciudadanos que se llamasen como él o su heredero. Se desató entonces una persecución de cualquier rival invitándoles a palacio con promesas de poder para después asesinarles… Rodeado de enemigos, Vitelio hizo un último intento de ganarse el apoyo de la ciudad, sobornó y dio poder a quien hizo falta. Mientras, los ejércitos del Danubio estaban cada vez más cerca. Ante la inminente amenaza, Vitelio trató de ganar tiempo y envió a unos emisarios acompañados por vírgenes vestales para negociar una tregua e iniciar conversaciones de paz. Al día siguiente, los mensajeros volvieron con la noticia de que el enemigo estaba a las puertas de la ciudad. Vitelio se dispuso entonces a huir, pero antes sucedió [que tenía que] hacer una última visita a palacio. Allí fue asesinado por unos de los hombres de Vespasiano”´´. 7.

 

   4.7 Vespasiano, “el Jinete de la peste montando el Caballo bayo”

   “Cuando abrió el cuarto sello, oí la voz del cuarto ser viviente que decía: Ven. Miré, y vi un caballo bayo. El que lo montaba tenía por nombre Muerte, y el Hades lo seguía: y les fue dada potestad sobre la cuarta parte de tierra, para matar con espada, con hambre, con mortandad y con las fieras de la tierra. Ap. 6, 7-8. Vespasiano fue un hombre con muchas habilidades para sobresalir en la empresa que se dispusiera como lo hizo de manera casi “ejemplar”. Las legiones del lejano oriente u oriente próximo vieron en Vespasiano un líder influyente como lo fue en Siria y Judea que lo aclamaron como Emperador antes que lo fuese en sí. En el mandato de Nerón, Vespasiano sofocó la rebelión judía del 67 d.C., previos acontecimientos de la caída de Jerusalén en el año 70 al 72 por su hijo Tito como general al frente donde se produjo la masada donde los judíos se suicidaron –la clase aristocrática- para no ser más nunca esclavos de nadie. De igual manera Vespasiano se fue a Egipto y le aclamaron como Emperador donde controló los suministros de granos para el Imperio. A la muerte de Vitelio, Vespasiano fue nombrado Emperador “el 21 de diciembre de 69” de la Era cristiana.

  ´´ “Tras la muerte de Nerón [quién quemó a Roma con azúcar para culpar a los cristianos años antes] en 68 [d.C.], Roma fue testigo de una sucesión de efímeros emperadores y guerras civiles. Galba [conquistador] fue asesinado por Otón [guerrero], que fue derrotado por Vitelio [hambruna]. Los partidarios de Otón, buscaron otro candidato al trono al que apoyar, se decidieron por Vespasiano [enfermedad]. Según Suetonio [–un cronista-], una profecía alegó que los futuros emperadores vendrían del este. Vespasiano acabó creyendo que esta profecía se refería a él y una serie de agüeros, oráculos y augurios a los que consultó reforzaron esta creencia [infundada].

   Vitelio, el emperador actual [del que hemos compartido], tenía las mejores tropas de su lado, las experimentadas legiones de la Galia [Francia] y Germania [Alemania]. Sin embargo, las legiones de IIiria, Moesia y Panonia proclamaron su lealtad a Vespasiano, haciéndole el amo de la mitad del mundo romano. Esto ocurrió el 1 de julio, fecha que sería conmemorada en los siguientes años como el aniversario de su ascenso al trono [Suetonio, vida de los doce césares 6].

   Mientras Vespasiano se dirigió a Egipto para asegurar el suministro de grano, sus tropas entraron en Italia por el noroeste al mando de Marco Antonio Primo. Las tropas de Vespasiano derrotaron a las de Vitelio en Bedriacum y avanzaron hacia Roma. Tras una lucha feroz en la guerra civil, los soldados entraron en la ciudad. Durante la confusión de la lucha el Capitolio se incendió y el hermano de Vespasiano, que era el prefecto de la ciudad fue asesinado por una muchedumbre de la que a duras penas escapó Domiciano [que era un mozo mocoso para entonces].

   Cuando recibió las noticias de la derrota y muerte de su adversario Vitelio, expendió un suministro de grano a Roma, con un edicto en él anulaba las leyes del anterior emperador Nerón, incluyendo las relativas a la traición. De camino a Roma, visitó el Templo de Serapis, en el que experimentó una visión. Durante la visión lo encontraron unos sacerdotes del templo que quedaron convencidos de que podía obrar milagros.

   La antigua administración del Imperio [Romano] quedó en manos del antiguo gobernador de Siria y aliado de Vespasiano Cayo Licinio Muciano, auxilado por el hijo del emperador, Domiciano. Durante su gobierno, Muciano inició la reforma fiscal que debía restaurar los fondos del Imperio. Tras la llegada a Roma de Vespasiano a finales de 70, Muciano presionó al emperador a fin de que recogiera tantos impuestos como le fuera posible [Dión Casio, Historia Romana, LXVI.2].

   [Muchas fueron las actuaciones de Vespasiano que fue el padre del general Tito –como su nombre- que destruyó a Jerusalén en el año 70, y el padre de Domiciano que posteriormente fue el emperador tan odiado como Nerón (Nerón revividus). Vespasiano, se hizo de muchos impuestos hasta el punto de cobrar un impuesto por la orina (Pecunia non olet, el dinero no huele) que desencadenó descontento por mucha más carga impositiva por los impuestos].

   A principios de 70, Vespasiano estaba todavía en Egipto. Según Tácito, el viaje se retrasó a causa del mal tiempo [Tácito, Historia IV]. Sin embargo, los historiadores modernos sostienen que Vespasiano se quedó a fin de consolidar su poder en la provincia [Sullivan, 1953, p. 67-70]. Historias acerca de la divinidad del emperador comenzaron a circular por Egipto [Dión Casio, Historia Romana, LXVI.2].

   Durante este periodo estallaron protestas en Alejandría motivada por la nueva política fiscal del emperador, que causaron que los envíos de grano de Egipto a Roma se detuvieron. No obstante, Vespasiano logró que se restaurara el suministro cuando la población de la capital imperial estaba al borde de desfallecer de inanición.

   El levantamiento de Egipto no hizo sino aumentar la crisis que experimentaba el Imperio, crisis motivadas por las guerras civiles que azotaban estas tierras. La rebelión de Judea fue finalmente sofocada por el general Tito en 70 [con la caída de Jerusalén y del Templo llevándose su oro para construir el Coliseo Romano donde tiraban a los cristianos a las bestias para ser destrozados y así exaltar a los citadinos romanos], tras la captura de Jerusalén.

   Fallecimiento. Vespasiano acostumbraba a pasar los calores del verano en una villa cerca de las termas de Cotilia en Campania, cerca de Rieti (Italia) [Suetonio, Vida de los doce césares, 24] y allí el 23 de junio de 79, falleció con 69 años, víctima de una inflamación intestinal que le produjo una diarrea aguda. Según Suetonio [Suetonio, Vidas de los doce césares, 23.4], durante el primer ataque de su enfermedad dijo: “Vae puto deus fio” [Cuya traducción aproximada es: ¡Pobre de mí, creo que me estoy convirtiendo en dios! Cuando morían, los emperadores romanos eran deificados; de este modo, cuando vio cercano el momento de su muerte exclamó que se estaba convirtiendo en un dios].

   Fue divinizado inmediatamente por su hijo y sucesor Tito [Plinio el Joven, Panegírico de Trajano 11,1]. 8.

 

   CONCLUSIONES.

 

   Veamos algunas consideraciones a saber:

-El Apocalipsis de Juan es un escrito que se dirigió a las comunidades creyentes de Jesús el Mesías en el Asia Menor lo que hoy en día es Turquía por su ubicación geográfica.

-El Apocalipsis debería llamarse ‘Apocalipsis de Jesús y no juanino, puesto que, el principal personaje es Jesús no tanto como lo vemos en los evangelios que era manso con una humildad que se identificaba con los pobres a los cuales se les dio el evangelio. En cambio, en Apocalipsis, Jesús es uno que viene a combatir al Imperio romano y a los césares, y sus seguidores no dan tanto la "mejilla", sino de resistir hasta morir. Era una guerra de resistencia y se comenta hasta armada en la lejanía de otras tierras. 

-Los cuatro Jinetes y sus caballos representan esos acontecimientos que despuntaron en ese año 69 de que se coronaran cuatro generales del Imperio, y que fue el preámbulo del siguiente año 70 de la caída de Jerusalén y todo lo que esto significó hasta nuestros días.

-Los nombres de estos jinetes ha sido y seguirá siendo de estudio y debate, pensando que a lo mejor nunca sabremos con exactitud quienes fueron en realidad. No obstante, dado que, en ese año 69 de la Era cristiana del Primer Siglo y lo característico y emblemático de los personajes no hemos dado la tarea de reconstruir esos episodios y darles los nombres de esos cuatro generales: Galba, Otón, Vitelio y Vespasiano a manera de propuesta historiográfica siendo que no tenemos todos los materiales a la mano y que tan solo es una deducción de tales acontecimientos.

-En las lecturas apocalípticas metidas en un misticismo de la simbología profética, para que la información no fuese entendida a plenitud, y que esta información cayera en manos enemigas era necesario que el que la recibiera supiera los códigos descritos que solo el lector advertido le sabía dar la interpretación a los acontecimientos para develar eso que estaba escrito.

-Los creyentes o cristianos que posteriormente necesitaban saber los pormenores de esta información en pleno desarrollo y para los nuevos creyentes o cristianos que de los siglos II, III, IV de esos años 90 donde estaban marcados la simbología de una época crucial.

-El Apocalipsis no solo era para la revelación de su época, y lo fue, sino que, sirvió de replanteamiento de las “fuentes” pasadas para buscar los caminos de unas nuevas “fórmulas” que todos los seguidores de Jesús el Cristo estaban experimentando y por experimentar, sobre todo las comunidades del Asia Menor que tenía por referente a Roma como imperio cruel y despiadado.

-Apocalipsis es un lenguaje de acción y de combate en resistencia de los pueblos, y no se descarta la lucha hasta armada de los cristianos asiáticos o de la Eurasia. Esta resistencia duró cuatro siglos donde el imperialismo mantuvo la imposición por años hasta que muchos cristianos agobiados de tanta barbarie se cansaron y sucumbieron ante la “apostasía” de negar la fe, tirar la esperanza y entregarse por completo. Pero, otros tantos, siguieron en la resistencia y de reavivar la esperanza. De esto es lo que podemos decir que es un apocalíptico hasta nuestros tiempos.

-El Imperio romano (imperialismo) supo doblegar con su conquista, guerra, hambre y peste desdibujar la lucha cristiana de liberación que Jesucristo es el Señor y no era ningún César el Emperador. Todo eso se perdió casi por completo y la religión del Imperio romano se impuso.

-La fe del evangelio y la esperanza apocalíptica seguirán su curso histórico hasta que él venga en la forma cuántica que desconocemos.                    

En esto pensad.

 

APUNTES Y BIBLIOGRAFÍA.

 

1.    Apocalipsis de Jesús, el Mesías: cuando se devela el misterio-Rudolf Puigdollers Noblom / Google Libros.

2.    Wikipedia® / Artículo / Jinetes del Apocalipsis / Fundación Wikimedia Inc., / Organización sin ánimo de lucro / Fuente Web: https://es.wikipedia.org/wiki/Jinetes_del_Apocalipsis#cite_ref-10

3.    Iglesia Alianza Carcelén / Orientaciones prácticas para interpretar el Apocalipsis / Entrevista al Teólogo Juan Stam / La Fuente (Paraguay) / Blog de WordPress.com / Fuente Web: glesiaalianzacarcelen.org/2011/08/29/orientaciones-practicas-para-interpretar-el-apocalipsis/

4.    ítem [b]. Apocalipsis de Jesús, el Mesías: Cuando se devela el misterio. Rudolf Puigdollers Noblom. E –book.google.co

5.    Wikipedia® / Artículo / Año de los cuatro emperadores / Fundación Wikimedia Inc., sin ánimo de lucro / Fuente Web: https://es.wikipedia.org/wiki/A%C3%B1o_de_los_cuatro_emperadores

6.    Wikipedia® / Artículo / Galba / Fundación Wikimedia Inc., sin ánimo de lucro / Fuente Web: https://es.wikipedia.org/wiki/Galba

7.    Wikipedia® /Artículo / El año de los cuatro emperadores / Fundación Wikimedia Inc., sin ánimo de lucro / Fuente Web: https://es.wikipedia.org/wiki/A%C3%B1o_de_los_cuatro_emperadores#De_Ner%C3%B3n_a_Galba

8.    Wikipedia® / Artículo / Vespasiano / Fundación Wikimedia Inc., Sin ánimo de lucro / Fuente Web: https://es.wikipedia.org/wiki/Vespasiano

 

    ACERCA DEL AUTOR.

    JAIRO OBREGÓN nació el 13 de abril de 1964 en Maracaibo, Venezuela. Cursó estudios como Bachiller en Teología, en el Instituto Bíblico Bautista de Maracaibo y graduado por el Seminario Teológico Bautista de Venezuela (STBV), desde 1987-1994, teniendo obra práctica pastoral y de profesor en teología y misiono logia en varias partes del país durante mucho tiempo. Al tiempo fue, fundador de la Fundación Misionera Obregón, en una experiencia misional de ayuda integral con los indígenas Wayuu, Yucpa y Barí (ya desde antes con la Misión Bautista) en el occidente venezolano, desde 2002-2014. Estudió y graduó como Licenciado en Educación Mención Desarrollo Cultural, en la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez  (UNESR), con el auspicio de la Fundación Misión Cultura, entre 2005-2012. Estudió y graduó como Licenciado en Ciencias Bíblicas y Teológicas por el Centro Venezolano de Estudios Teológicos (CEVET), y el Seminario Doctor Martín Lutero, desde 2007-2014. Actualmente, es un cristiano laico y librepensador. Es escritor articulista, comentarista, ensayista e investigador independiente en sus dos blogs en Internet:

http://obregonjairo212.blogspot.com

http://jairoobregon.blogspot.com

Comentarios

Entradas populares de este blog

LAS EVIDENCIAS PROFÉTICAS DE LAS VIDAS DE ENOC, ELIAS Y EZEQUIEL CON TECNOLOGÍA ANTIGUA NO DE ESTE MUNDO

APOCALIPSIS 13, 17-18: LA BESTIA, SU NOMBRE, SU NÚMERO Y MARCA. ¿POR QUÉ NO SE PUDO COMPRAR O VENDER? ¿FUE EL 666 O 616?: OBSERVANCIAS

LA DEPORTACIÓN A BABILONIA DE LOS JUDÍOS: ¿NACIMIENTO DEL JUDAÍSMO RELIGIOSO Y CULTURAL? (2ª. Parte)